Los avances médicos y tecnológicos han influido en que las personas vivan en promedio más tiempo que antes. Tiempo en el que varias de sus necesidades e intereses se mantienen, por lo que la intención de satisfacerlos se conserva igualmente. En este marco, el acceso al crédito puede ser una buena opción para lograrlo.
En México, datos del INEGI señalan que entre 1970 y 2023, la población adulta de 30 a 64 años aumentó de 24 a 43 % mientras que el porcentaje de adultos mayores se incrementó a más del doble, al pasar de 4 a 10 %.
Resulta lógico suponer que las instituciones financieras consideren importante a este sector de la población, por lo que actualmente existen organizaciones que otorgan préstamos personales, hipotecarios e incluso tarjetas de crédito a personas adultas mayores. De modo que si tu abuelo o abuela están interesados en alguno de estos productos, ¡infórmales que pueden solicitarlo!
Como en cualquier caso, contar con un buen historial crediticio les ayudará a obtener mejores condiciones, por lo que si ellos no saben hacerlo, te recomendamos ayudarles a obtener su Reporte de Crédito Especial en nuestra página o en la app de Buró. Es gratis una vez cada 12 meses y si necesitaran uno adicional, el costo de cada uno en el mismo periodo es de $35.60.
Si adquieren Mi Score, por $58 tendrán el panorama completo, ya que éste les ofrece su calificación crediticia reflejada en una sola cifra. Mi Score se calcula con base en la información presentada en el Reporte de Crédito Especial, por lo que es el complemento perfecto.
Después, acudan a las instituciones bancarias de su preferencia, soliciten informes sobre los créditos que ofrecen para personas mayores y comparen para elegir la mejor opción. Hay de diferentes tipos y montos, y para que vayan mejor preparados, aquí te enlistamos algunos de los requisitos que en general podrían pedirles:
- Identificación oficial del solicitante.
- Comprobante de domicilio.
- Aval o garantía (en ocasiones).
Como te hemos mencionado en otras ocasiones, el crédito, bien manejado, es una gran herramienta financiera, incluso en la etapa más avanzada de la vida.